Es difícil no pensar en Mies y que no se venga a la mente el movimiento modernista.
Y es que este arquitecto de origen alemán fue uno de los pioneros de este estilo, este que supuso un antes y un después en lo que a diseño se refiere.
Mies buscó establecer un estilo que representara la modernidad que se empezaba a respirar en el siglo XX; Con ello creó una arquitectura que integraba elementos industriales como el acero e implementó por primera vez las láminas de vidrio para definir espacios interiores.
Buscaba que sus espacios fueran abiertos y que fluyeran sin ningún obstáculo.
Su legado a la arquitectura fue la representación de estancias que se vieran naturales sin el uso de ostentaciones, aplicando su famosa frase “menos es más” que no sólo estaba presente en obras arquitectónicas sino en espacios interiores.
Su estilo lo llevó de igual manera, a sobresalir en líneas del interiorismo y mobiliario, representando su premisa: muebles que destacaban por seguir formas sencillas y una búsqueda con la integración de la naturaleza o su entorno, sin dejar de empujar hacia lo moderno y futurista.